Seis fueron hospitalizados, cuatro se dieron de alta, el obispo diocesano y el presbítero Uriel Mejía se encuentran graves
Desde el inicio de la pandemia, un total de 50 sacerdotes pertenecientes a la Diócesis de Aguascalientes han resultado contagiados por el coronavirus Covid-19, afortunadamente la gran mayoría con síntomas leves que solo obligaron al confinamiento y sin que ninguno de ellos haya fallecido por esta causa.
Únicamente seis de ellos debieron ser hospitalizados, cuatro de ellos a mediados de año y, recientemente, el obispo José María de la Torre Martín y el presbítero Uriel Mejía Cortez, quienes permanecen hospitalizados graves.
Ricardo Veloz Cuéllar, presidente de la asociación Fraterna Asistencia Social Aguascalientes (FASA), organismo encargado de la atención médica de los sacerdotes locales, explicó en conferencia de prensa que los pastores de la Iglesia Católica en la entidad, como el resto de la humanidad, no se han visto exentos esta enfermedad que afecta a la humanidad entera.
Los sacerdotes no somos la excepción, vivimos en el mundo, estamos en los servicios litúrgicos y hasta ahorita hemos resultado contagiados 50, porque yo también me contagié. Todos hemos salido adelante, unos con dificultades y otros de forma asintomática, pero ninguno ha muerto por Covid-19 aquí en la Diócesis de Aguascalientes
En todos los casos, señala, las pruebas de detección PCR, han sido realizadas por el Instituto de Salud del estado (ISSEA), en tanto que quienes han requerido hospitalización, han contado con el apoyo del Hospital Hidalgo.
Nosotros no tenemos Seguro Social, ISSSTE ni seguro de gastos médicos mayores, entonces los sacerdotes que han debido ser internados, se han atendido en el Hospital Hidalgo. En promedio quienes no se han internado, se han pagado dos mil pesos por la medicación de quienes se han atendido en casa.
Ricardo Veloz Cuéllar, Presidente de la asociación Fraterna Asistencia Social Aguascalientes
En este sentido, explicó que tanto el obispo diocesano José María de la Torre como el padre Uriel Mejía, se encuentran en un estado de salud grave, el primero de ellos con 15 días de intubación y 20 días el segundo.
Explicó que, luego de la mejoría en el estado de salud del jefe de la Iglesia Católica en Aguascalientes, su estado general ha sido estable, con momento de buena saturación de oxígeno y mejoras en cierto momento, sin complicaciones mayores, lo que hace albergar esperanzas en su recuperación.
Por otro lado, se dio a conocer el lamentable fallecimiento, ocurrido el pasado domingo, del padre Manuel Esquivel Díaz, adscrito a la capellanía de San Martín de Porres y quien venía arrastrando varios padecimientos que lo tuvieron postrado por varios meses.
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De diciembre se realizará la Jornada Anual de Oración por la salud de los sacerdotes y colecta a favor de FASA
FUENTE: El Sol del Centro
