En Aguascalientes existen aproximadamente 1,200 monumentos históricos catalogados por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) la mayoría de ellos situados en la ciudad capital. Estos templos, espacios públicos, casas habitación y fincas rurales representan un gran patrimonio ya sea por sus características arquitectónicas o la importancia histórica que tuvieron.
El maestro Christian Medina, investigador del INAH explica que hablando de las llamadas casonas por el tamaño que tenían, las más antiguas que aún están en pie se trata de aquellas construidas a finales del siglo XVl hasta mediados del siglo XVlll y aunque existen algunas muchas más de años posteriores, existen cuatro que destacan por sus características tan emblemáticas.
Cazona Corzo -Una de las primeras fincas hidrocálidas
Christian comenta que al juzgar por su ubicación en el primer cuadro de la ciudad, a espaldas de la catedral y en donde fue la antigua plaza principal, se podría deducir que fue una de las primeras casas que se construyeron en Aguascalientes.
Con una disposición arquitectónica que corresponde a mediados del siglo XVll o incluso finales, fue una casa mucho más grande lo que podemos ver en la actualidad, que abarcaba prácticamente todo el frente de esa cuadra, incluso lo que antiguamente fueron la entrada a las caballerizas, que ahora es una tintorería.
Dentro de los datos históricos que se saben es que a finales del siglo XlX perteneció a la familia de la mamá del escritor, periodista y político Eduardo J.Correa, incluso la casa es mencionada en su novela Un Viaje a Termapolis.
A finales de ese siglo, la finca fue dividida y la parte sur fue destinada a un convento de religiosas Siervas de María Ministras de los Enfermos, que actualmente se conoce conoce como Templo del Ave María.
se encuentra incluso un arco de piedra, artequeticti, que podríamos pensar que es uno de los más antiguos que se encuentran en ags.
Actualmente acondicionado como el restaurante Casona Corzo,en tu visita podrás apreciar la arquitectura propia de las casas coloniales del siglo XVll, pues la parte central de lo que fue la finca, primer patio, habitaciones principales y zaguán se conservaron intactas y aunque a lo largo del siglo XX cayeron en el abandono y algunos de sus techos se destruyeron, hace aproximadamente siete años cuando comenzó su restauración se reconstruyeron las bóvedas y se rescató parte de la pintura mural, incluso se logró conservar un pequeño oratoria que había tenido la casa.
Casa Terán – Hogar de grandes familias
A escasos metros del templo y antiguo convento de San Diego, se encuentra esta casa que también fue mucho más grande de lo que vemos en la actualidad. El maestro Christian comenta que por lo menos perteneció a tres familias importantes de la ciudad, una de ellas la familia Terán, donde vivió el político y uno de los grandes héroes del liberalismo de Aguascalientes del siglo XlX, Jesús Terán Peredo.
Posterior a ellos, la casa tuvo otros dueños, como la familia Rangel de la Hacienda Garabato, sin embargo cuando se recuperó para convertirse en un centro cultural se decidió nombrarla como el político liberal.
La familia de italianos Pani, importantes la notoriedad que ganaron por su labor arquitectónico nacional, también fueron uno de los residentes, de hecho en el zaguán de la casa se encuentran dos pinturas murales que representan Nápoles, tierra de origen de esta familia.
En cuanto a su valor arquitectónico se trata de una casa con traza del siglo XVll, con un patio central, seguido de dos pequeños patios de servicio donde aún se pueden observar los restos de lo que fue la cocina, se conservan los fogones y chimeneas de lo que fue la cocina de la casa.
Casa Terán es una de las pocas fincas que conservan cielos rasos, lo que se refiere a techos falsos que colocaban debajo de los verdaderos, que se pintaban según la la decoración de la habitación. La antigua casa conserva por lo menos seis techos rasos de una calidad artística exquisita, antiguamente colocados en lo que eran las recámaras principales y la sala.
Centro de Artes Visuales – Una joya barroca
En la calle Venustiano Carranza es posible encontrar fincas históricas importantes, ya que antiguamente era el camino que unía la Villa de Aguascalientes con el Pueblo de Indios de San Marcos, convirtiéndose en una de las primeras calles del estado.
El maestro explica que el actual Centro de Artes Visuales, se trata de una antigua casa que puede situarse en el siglo XVlll y aunque se desconoce quienes fueron sus dueños originales, es un inmueble que destaca por su valor arquitectónico, pues conserva elementos barrocos en su fachada que se preservan hasta nuestros días.
Una gran portada barroca adorna su entrada, rematada en medio círculo con diferentes elementos, como rosetones que hacen referencia directa a este periodo de la historia cultural. “Es por mucho la portada barroca más importante de una casa en Aguascalientes” agrega el maestro.
Por dentro en la zona del zaguán también se puede ubicar un arco barroco con estrías propias de este estilo, además de que los techos en bóveda de esta área han sido rescatados y devuelto a sus colores originales, rojo y blanco, una decoración muy común durante el siglo XVlll.
Museo Regional de Historia -Legado de Refugio Reyes
También en la calle Venustiano Carranza se encuentra esta casa que data del siglo XVlll, que además de contar con un gran valor histórico por su antigüedad, también destaca por haber sido intervenida por el emblemático arquitecto autodidacta Refugio Reyes.
A principio del siglo XX al ser adquirida por la familia Arellano, estos piden a Refugio Reyes modificar y embellecer su propiedad. Este utiliza características recurrentes en su trabajo como el uso de cantera rosa, amarilla y verde, materiales autóctonos de la región, que colocaría en el marco de la portada del comedor y el cual también puede observarse desde la calle.
Su intervención también consistió en la modificación del primer patio y fachada, esta última inspirada en un estilo renacentista italiano, que se conserva hasta la actualidad.
En cuanto al primer patio creó columnas para formar pasillos alrededor de ellos, con ventanas que dan paso a una habitación que se encontraba en medio del patio, lo que antiguamente correspondía al comedor y adornado con una fuente central con un angelillo típico del porfiriato.
FUENTE: Innovación Económica