Nombramientos de párrocos se han detenido debido a la falta de la máxima autoridad eclesiástica en la entidad
Con el deceso del obispo José María de la Torre Martín, acontecido el pasado mes de diciembre, es el administrador diocesano, Juan Gabriel Rodríguez Campos, el representante de la máxima autoridad eclesiástica en Aguascalientes, sin embargo, la Iglesia mantiene actividades en rezago, las cuales las tiene que efectuar el obispo.
Una de estas actividades es el nombramiento de párrocos, la cual es un proceso propio del obispo, no obstante, en caso de que se cumpla un año sin éste, en la Diócesis de Aguascalientes, es el administrador quien contará con la facultad necesaria para realizar dichos nombramientos.
Al respecto, el vocero de la Diócesis de Aguascalientes, Rogelio Pedroza, señaló que no se tiene conocimiento sobre la asignación del nuevo obispo de la Iglesia, refirió que es mediante un boletín que se hace el nombramiento, sin embargo, durante el proceso del mismo no se reciben avances ni nombres de los posibles candidatos.
El presbítero añadió que si bien la Iglesia prevé estas ausencias, sí se resienten las mismas respecto a algunas tomas de decisiones, como lo son las relacionadas con el Gobierno; no obstante, dijo que mantienen la fe en que el nombramiento del nuevo obispo de la Diócesis de Aguascalientes sea pronto.
En otro tema, respecto a la vacunación contra el Covid-19, destinada a los sacerdotes, aseguró que cada uno de ellos acuden a las convocatorias el día que les corresponde, por lo que dijo que los presbíteros no gozan de privilegios.
Finalmente, externó que no se han presentado reacciones o efectos secundarios posteriores a la vacuna por el Covid-19, entre los padres que han recibido la inoculación; asimismo, hizo un llamado a la sociedad a que no baje la guardia respecto a las medidas de sanidad, como el empleo de cubrebocas, uso de gel antibacterial, entre otras, además de exhortar a la ciudadanía a que acudan a recibir el biológico contra el coronavirus.
Fuente: El Sol del Centro
