- Las pérdidas para el sector son de alrededor del 40%
- El 30% de los restauranteros sigue sin reactivar su negocio
La industria restaurantera comenzó a percibir un ligero repunte los fines de semana con un 40% de la capacidad de los establecimientos, señaló el presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), Claudio Innes Peniche, quien destacó que las pérdidas para el sector son de alrededor del 40% con relación al 2019, mientras que el 30% de los empresarios no muestran aún intención de reabrir sus negocios.
Si bien el 70% de los restaurantes han abierto sus puertas, la Canirac desconoce si cerrarán en definitiva sus operaciones o esperan mejores tiempos para reactivar sus negocios, aunque aseveró que, al menos, en lo que respecta a los 150 socios de la asociación, no decae el ánimo, pues quienes se atrevieron a abrir sus cortinas desde hace aproximadamente mes y medio, comienzan ya a sentir una mejoría en sus ventas, aunque siguen operando prácticamente sin ganancia.
Explicó que la emergencia sanitaria obligó a los trabajadores a transformarse y cambiar de actividad laboral, pues ante la incapacidad de muchos restaurantes de abrir nuevamente, varios meseros ahora son repartidores o hasta vendedores de artículos de limpieza, porque la necesidad de llevar el sustento a sus familias persiste.
Externó que hace un par de semanas se pudo sentir un ligero aumento en las ventas, pues los fines de semana se llegan a reportar hasta un 40% de incremento en la capacidad de los establecimientos, aunque no es suficiente para sostener a los restaurantes, “pero el tener comensales ya es bastante alentador, aunque nos hemos dado cuenta que el problema no es el permiso para la apertura, sino la afluencia de clientes, aunado a la escasez de dinero circulando”, explicó ante la errada percepción de muchos restauranteros de que una vez que se permitiera la apertura de los establecimientos, todo volvería a la normalidad y con ella los clientes.
Ahora reconocen que el reto es volver a ganar la confianza de los clientes con la implementación de los protocolos que se están cumpliendo, por lo menos por parte de los socios Canirac, y aseguró que prueba de ellos es que ninguno de los integrantes de la asociación ha sido sancionado o multado por incumplimiento, aunque esto en gran medida se debe también a que los comensales colaboran en el cumplimiento de las medidas sanitarias.
El líder empresarial dijo confiar en que habrá una recuperación de manera paulatina, aunque lo que ahora tienen es ya un suspiro y un aliciente para seguir adelante.
FUENTE: La Jornada Aguascalientes