Conocimiento y fortaleza física, las características de los recién egresados
La preparatoria militarizada es un modelo académico mediante el cual atinadamente se asocia la formación humanista con la enseñanza científica en la que además se consideran las necesidades propias de la juventud.
Así lo destacó el director de este plantel, Eduardo Gómez Gómez, durante la graduación de los 45 jóvenes que forman parte de la primera generación de esta preparatoria “Lanceros de Aguascalientes”.
Señaló el catedrático que bajo el esquema de este bachillerato se potencializa la capacidad de aprendizaje con el desarrollo de un criterio ciudadano que permite a “nuestros alumnos ser agentes del cambio y a relacionarse socialmente en un ambiente de respeto, sistema que permite forjar futuros profesionales que respondan ante la adversidad con entereza”.
Subrayó que “la ausencia de una educación sin un marco ético puede decantar en personas sin escrúpulos, incapaces de proceder de forma ética y su formación profesional puede dar lugar a personas fanáticas incapaces de cuestionarse o explorar y comprender el mundo natural y social que les rodea”.
Indicó que, sin el elemento militarizado no se entendería con claridad esa capacidad de organización y fortaleza física y mental para sobrellevar la frustración y contar con la disciplina necesaria para alcanzar objetivos.
Por nuestra parte, si no logramos identificar las necesidades de nuestros estudiantes nuestra oferta educativa no sería ni pertinente ni significativa.
Señaló que los egresados de este plantel son herederos de aprendizajes científicos y académicos que han permitido el progreso social, así también se han alimentado del conocimiento de una organización como el Ejército Mexicano que tiene más de 100 años de haber sido institucionalizado.
Agregó que estos haberes, habilidades y aptitudes desarrolladas, permitirán a los egresados tomar decisiones para su bienestar y el de su comunidad, “su paso por este bachillerato, les ha permitido resolver problemas, con una exigencia física, mental y ética. Les ha costado sudor y en ocasiones un gran esfuerzo, pero con perseverancia y entereza, han alcanzado aprendizajes que deseamos sea de utilidad para ellos y sus allegados”.
Agradeció a los padres de familia el apoyo y el acompañamiento que brindaron a sus hijos en estos dos años y el haber depositado su confianza en este bachillerato.
Estoy convencido de que, si no generamos una comunidad educativa sin el respaldo de los padres, el proceso no sería exitoso.
Eduardo Gómez Gómez, Director de la preparatoria militarizada en Aguascalientes
Proceso en el que también destaca el trabajo docente.
Fuente: El Sol del Centro
