Recientemente, diversos medios locales y nacionales, entre los que destaca Reforma, han exhibido información que muestra el modus operandi de José Humbertus Pérez, activista que ha construido una red de extorsión y lavado de dinero en diversos penales del Estado de México. Los testimonios recabados por el medio dan cuenta de las exigencias de “aportaciones” a los reclusos, que oscilan entre los mil 500 y 2 mil 500 pesos semanales. De no cumplir con estas cuotas, son agredidos físicamente o amenazados con su traslado de penal, así lo califican como extorsionador de presos.
La información hecha pública es sólo la punta del iceberg de toda la operación encabezada por José Humbertus Pérez a través de las organizaciones Frente Mexiquense en Defensa para una Vivienda Digna y Presunción de Inocencia y Derechos Humanos. La construcción del entramado se remonta a más de una década, cuando este personaje fundó en 2008 el Frente Mexiquense; cuya operación inicial se circunscribía a los municipios de Tecámac, Ecatepec y Cuautitlán Izcalli.
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Poco a poco se fueron sumando agremiados, lo que le permitió incrementar sus ingresos a través de aportaciones y expandir su red de influencia hacia otras entidades; hacia 2015 ya había logrado expandirse a Veracruz, Quintana Roo, Nuevo León y Chihuahua. Sin embargo, ese año se detuvo la operación al ser preso.
Durante 5 años la operación se detuvo, aunque su estadía en la cárcel le permitió fraguar un nuevo mecanismo a costa de la defensa de presos acusados por delitos de alto impacto. Mucho se ha dicho acerca de la defensa de secuestradores, violadores y feminicidas por parte de Presunción de Inocencia y Derechos Humanos; sin embargo, el punto central es el mecanismo financiero detrás de esta agenda.
A su salida de la cárcel, en 2020, reinició la operación ahora encabezada por Presunción de Inocencia, fundada en su estadía en la cárcel. Reactivó el mecanismo de cuotas y comenzó con la extorsión hacia familiares y presos como lo relata Reforma.
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Opacidad
Aunque el activista se ha defendido, señalando que las imputaciones en su contra son falsas, lo cierto es que ha evadido esclarecer el manejo de recursos a través de las organizaciones que lidera. Ejemplo de ello es que la única auditoría practicada al Frente Mexiquense mostró irregularidades en el manejo de recursos como:
- Falta de registro de las aportaciones, falta de deposito de recursos en cuentas bancarias y falta de comprobación de gastos.
A esto se suma que ninguna de las organizaciones figura en el registro de Organizaciones de la Sociedad Civil de la Secretaría de Gobernación, lo que le permite manejarlas al margen de cualquier escrutinio gubernamental. De hecho, el registro del Frente Mexiquense en como una Sociedad Anónima de Capital Variable, lo que le posibilita triangular recursos en su esquema.
Seguramente seguirá saliendo a la luz información sobre José Humbertus Pérez y su red de extorsión.
Fuente: Industrias México.
